jueves, 25 de junio de 2015

La Revolución de la Conciencia


"Todo vibra, todo fluye y refluye en el constante movimiento oscilatorio de las polaridades...Cualidades antagónicas que generan tensiones dinámicas para generar movimiento que finalmente son distintos grados de lo mismo...Como es arriba es abajo: comprendiendo el átomo se comprende a la galaxia, observando un árbol se puede allí revelar Dios... el que sabe por tanto tiene mayor responsabilidad y sobre su vida se derramarán las bendiciones más abundantes."

Despierto





Que es lo último que recuerdas haber querido ser antes que durmieras este sueño,
¿Qué tan fría esta la mañana. La sientes? Es invierno. Solo aquí. Donde estás tú, siempre será primavera.
Yo aún no he despertado, sigo induciendo lucidamente fantasías de ensueño, una telaraña de caminos con perlas de roció.
Creo aun no haber dibujado mi última canción, ni probado el brillo del crepúsculo.
A cuantas constelaciones estamos de vernos, que tan lejos o cerca se encuentran nuestras casas, un crucigrama dimensionado y cuadriculado formando realidades unidas y opuestas. No puedo verte con lo que soy ahora, no puedo oírte, no puedo tocarte… pero sigues estando, sigue ese amor por ti aquí. Es decir te siento te percibo, no con los sentidos que aquí poseo. Estas aquí, mi intuición me lo dice.
Sí, mi intuición por donde tú me murmullas  y yo te escucho. Como palabras mudas expresadas con total claridad sin ser mencionadas. Bueno eso lo sabemos.
¿Cómo te recibieron?, fue un sueño no tan largo, lograste descansar… Qué tal va el trabajo que siempre te gusto realizar.
Ahora que nos logras ver en toda nuestra totalidad, nos darías una mano, lanzando un puñado de estrellas de sensatez y juicio. Un poco de polvo de amabilidad, lluvia de bondad y algunos arcoíris de sentimentalismos.
Hay ahí praderas verdes y campos otoñales  en los cuales puedes volar libremente, donde los ruiseñores se escuchan cantar.
Por mi parte, te escribo para decirte, mi sueño va creando y dibujando nuevos calles verticales y ascendentes. Sigo riendo y bailando a veces ansiando  despertar y no disfrutando este sueño.
 Es una ilusión muy bella la que he creado, -la vez? te gustan sus colores?- He utilizado algo de gracioso jubilo y unos toques de profunda voz etérea. Tu cuadro quedo magníficamente terminado. Cada obra de arte que exponen todos al despertar, es un trabajo realmente hermoso. Amigo Hemos compuesto una exposición de lujoso oro en el universo.
Bueno tu familia de ensueño te realizo una encantadora ceremonia, para exponer tu trabajo realizado. Todos asistimos. Todos te felicitamos y maravillamos, usaste tantos colores, utilizaste diferentes texturas, creaste un lienzo completo  y llenaste cada rincón de brillo que el altar se llenó  y desbordo de almas contemplativas y agradecidas en apreciar tu gran obra.
Sabes que siempre te pienso en mi sueño a diario, creo que ahora que estas despierto te encuentras más presente para todos.
Que mágico es pensar que el amor se sueña y se vive en todas las realidades. Como fue volver a despertar de un gran respiro, ascender y transmutar?-. Como se siente poder volver a ser lo que hemos sido siempre…?

Te volveré a escribir cualquiera de estos días, talvez cuando tu sueñes de nuevo o yo vuelva a despertar. 

(PD: dedicado  una luz que ilumina el cielo, Gabriel Chahin)

Carta a un Extraño




Existen millones de cartas que son escritas con la sola intención de liberarnos de algún sentimiento, que no queremos dentro.
Cuantas llegan a destino, solo si se da la ocasión y se toma el valor para enviar y exponer lo revelador de lo que nunca pudimos pronunciar, talvez por miedos, por egos, por inseguridades…
Lo que me llevo a escribir esta. No fuiste tú, fue el sentimiento que vino contigo, en un momento que yo no quería sentir. Que me hice la loca, engañándome a mí misma, negándole importancia, a ver que el poder de la mente y el auto convencimiento es fuerte, pero uno después de todo no se logra engañar completamente.
Esto no es una carta de amor y ni mucho menos, es una carta de una pequeña historia, y cada una de las pequeñas historias que constituyen mi vida y me hacen desencadenar procesos y descubrimientos asombrosos de los recovecos de mi alma.
Te conocí una noche destellante, de muchas luces, colores y melodías, muy contrario al mundo en el que me muevo. De personas grises, empaquetadas, que se dejan expresar a través de guiones prescritos, que no cultivan habilidades, más allá de las que necesitan para jugar con  el dinero. Que es toda una sorpresa, si logras desenterrar alguna creencia en la “existencia” y que posiblemente jamás se han cuestionado nada que desentrañe el autoconocimiento.
Soy de las personas que creen en la infinita búsqueda de lo extraordinario  de lo nuevo y sublime. Eso que te enciende, creo en la magia no como algo desconocido, sino como algo que te hace dejarte llevar y te hace sentir esa riquísima capacitadad de asombro, de poder ver con ojos infantiles totalmente hechizados las maravillas de la vida.
Me sentí en un cuento, como una gatita hechizada por el flautista Hamelin….
Persiguiendo eso, fui descubriendo un alma solitaria, abrumadora e indolente con momentos de elocuencia y brillo particular, el cual contagiaba y llegaba a juguetear junto la mía.
Creí que tenía el control total de mis emociones, que tanto podía estar equivocada?  O ciega de mi misma…
Era encantadoramente misterioso. Esa hermosa oscuridad  de su interior donde lucían las estrellas en su mismo cielo, centellaban e iluminaban el lugar, revoloteaban a mí alrededor, llegaron a acogerme, me sentí acunada en su luna.
Era de esperar, que una desconocida jamás llegaría a dejar una huella  realmente en  ese corazón,  y aunque antes de siquiera conocerlo, me prometí fidelidad de sentimiento a solo un hombre. Este ermitaño juglar remecía y confundía mi sentir, logrando sin intención dejarme descalza ante él.
Prejuicios de ambos, desconociendo la claridad de la comunicación, quedamos incomunicados, totalmente desconectados, de mundos distintos, de poca tolerancia y paciencia, por miedo a expresar sinceridad y mostrarnos débiles. Muchos fueron los motivos o talvez no, talvez solo fue desinterés.
 Así nuestros egos chocaron a toda velocidad, como 2 trenes de carga, descarrilando nuestros caminos.
Confié  en palabras vagabundas, sabiéndolo. Que fueron expresadas con poca trasparencia, dejaban  distinguir solo reflejos a los cuales me aferre e intente codificar.
Cuantas veces espere ese llamado que no llego, esa voz que no me busco y que poco a poco se fue apagando, como un  fuego sin intención  de volver arder.
Nunca quise preguntar que ocurrió, creo que al final de todo lo sabía.
Después de todo lo sucedido me vuelvo a encontrar y  me auto cuestiono -No me asusta amar… porque actuó, como si me aterrara-.
-No me importa decir, a los cuatro vientos que mi cariño por ti fue un hecho, talvez no fue un gran amor pero no menos importante.-
La intensidad es diferente al tiempo, y no hablo de pareja hablo de amantes, de caricias de besos y de la sinceridad que hubo en todo eso.
Al escribir esta pequeña historia, la dejo libre, flotar por el nebuloso cielo, sanando las quemaduras que en algún momento ardieron.
Ya sana, mi piel brilla  de nuevo y se prepara para otra búsqueda, mi corazón gitano no se cansa de luchar e indagar en las profundidades de un “Otro”. Muchas veces pudiendo transmutar en una llave maestra que pueda llegar abrir un cofre  y atesorar ese milagro que lo contiene. Sin ningún fin más allá, de que hagan reposar sobre mí su confianza, que su cabeza descanse entre mi pecho… acariciar historias, personalidades únicas, desenterrar miedos y sanar heridas. Porque el amor no es solo de amantes es para todo aquel que desee compartirlo.
Esto no es un adiós, es un amoroso desapego.
Deseando que ese corazón vagabundo y solitario conjugue con otro, en el cual se pueda fundir. Y que nunca deje de escucharse su canción…


Estoico





Existen personas que coinciden en momentos oportunos  que se encuentran en días amansados para poder apaciguar las fieras que los habitan, porque esas mismas personas en circunstancias diferente no habrían podido mirarse y ver realmente más allá de las superficiales apariencias.
Pero hay días que uno se entrega al momento, que decide que hacer de su día, ese día en especial cuando sus ojos lascivos me rugían deseo y sus manos estrechaban mi cuello.
Debo admitir que su forma incierta y desafiante de moverse era propio de un animal aguerrido, totalmente manipulador, claramente allí yo era la víctima inocente o mejor dicho una presa sin escapatoria, o que realmente no quería ser liberada, me sentía en  una cómoda inseguridad.
No podía dejar de esbozar una sonrisa ante esa inquietante sensación, de seductora tensión, la pasión que me encendía era química pura y perfecta como si 2 almas pudieran llegar a un solo punto de encuentro. Era un juego impecable como 2 piezas de puzles completamente encajadas de diferentes tableros, eso lo hacía aún más confuso.
Un combate  desigual, ya que el poseía una mente clara y elocuente, demasiado preparado acechando mis pensamientos inquietos. Yo, solo sintiendo el crepitar del fuego profundo, el arrebataba  el suelo de mis pies, y yo totalmente tambaleante y testaruda seguía negándole sus afirmaciones, odiándolo y deseándolo como si esas 2 palabras fueran miradas antes un espejo y solo tuvieran una lectura. Verdaderamente no era odio lo que sentía, sin duda era ira de mi misma, por dejarme  entrampar y provocar. A veces  cedía voluntariamente, cambiando completamente la versión de mis creencias, solo para no dejarme caer ante este lobo estoico, no sé si lo que me alteraba mas era verlo impasible o que se burlara de mis movimientos aleatorios para no perder el equilibrio.
No he construido arma alguna para mi auto defensa, me presento sin escudo, llevo conmigo mis formas, solo mis movimientos. Talvez disfruto enredarme entre los espacios de las mentes del mundo. Me gusta lanzarme al vacío y caer, probándome cada día si tengo las habilidades y la agilidad necesarias  para poder salir de esos pozos. Claramente esta vez me ahogue. No discerní lo alto que era escalar ese pozo y lo profundo q seria el caer, pero esto era seguro, ya que rara vez pienso algo antes de hacerlo, solo me lanzo y tengo que bancarme las heridas como consecuencias.
A veces la mejor forma que tengo para comunicarme con el mundo son mis acciones más que mis palabras. Mi padre es el del don de la palabra, yo herede la terquedad y la rapidez de la toma de decisiones de mi madre.
 Soy muy distraída, volátil el lenguaje que emana de mi boca, muchas veces no tiene coherencia alguna, no porque no sepa lo que digo, simplemente no le pongo la fuerza de intención y el interés que mereciera. Pero cuando actuó, todo cambia, todo tiene un sentido real y perceptible, cuando mi cuerpo se expresa, al tocar, sentir, probar y escuchar lo hago con todo el potencial, de mi voluntad.  Una completa entrega porque es aquí, donde me preocupo de hacer poesía.
No me considero una persona humilde, pero de ahí me alivio de saber que  defectos tenemos todos y no me avergüenza admitirlo. Sólo  sé que creo en mi misma y en mis valores, pero no, en sus propios límites, es allí donde se encuentran mis grietas, donde esta bestia flemática me quiebra y se aúna en mi interior.
Creo que llegue a fastidiarme solo por el hecho que el encontró en mí, esa parte oscura, ese cuarto que desconozco, hizo que me perdiera en mi misma, que  me cuestionara que tan fuerte son mis pilares… Creo que lo único que puedo afirmar y sostener en pie es  que me importa absurdamente  es el respeto como valor, refiriéndose a la consideración de los otros.
A las millones de almas que están agitándose  y sobreviviendo bajo sus pies en este momento en este presente, aquí y ahora.
Del resto debo aceptar a regañadientes que realmente soy un bebe de pecho en cuanto a la vida. Increíble lo inestable que puede ser ponerle atención a las palabras que te pronuncian seres tan diferentes y análogos a la vez. Me quedan como lecciones de vida, lo agradezco, pero no lo trago, su forma, me revuelve, me marea de emociones. Que tan curiosa puede ser mi alma, que indaga  para interiorizarse en una búsqueda, que quizás, no me compete. Adoro los desafíos, pero este no debería ser el mío. Creo que podría hacerme más daño del que podría  sacar en limpio, de algo más provechoso, que puede ser útil reuniendo aprendizajes.
Lo mejor sería alejarme de mis demonios y esperarlos, no ir por ellos y enfrentarlos enfurecidos. Sino dialogar a ver si dentro de toda oscuridad existe esa luz que lo renueva y lo equilibra.
Me disculpo por todas las veces que dije algo inadecuado, o use una palabra imprecisas para describir una acción. Nunca pensé que mi machismo, sería un defecto, que luciera tan grave o tan oscuro. Que se supone que he de hacer? si ya me forje de esta manera y no es que no pueda ir transmutando en estos ciclos de la vida, es  la sencilla razón, que me agrada convivir con esta forma de ser...
Y he llegado a la conclusión que talvez me consideraba una persona muy profunda y compleja, pero realmente puedo llegar a ser muy intensa, una apasionada impulsada de manera muy sencilla y básica. Talvez vez son momentos, donde se mezclan ambas verdades, soy esto y aquello a la vez y viceversa.
Creo que no me daré el derecho  de pedir una disculpa, por algunos actos que me parecieron insufribles, las disculpas se regalan como un obsequio, pedirlas seria en vano. Pero yo soy de una línea. No haría algo, que no me gustaría que me hicieran. Por eso, me preocupan los modales, porque te dan el espacio que mereces, sin necesidad de tener que demostrarlo. Como se realizaría si fueras parte de una manada, donde un macho alfa pelea su propio valor y respeto. Por el contrario, yo el valor se lo otorgó a cada ser, que en sus ojos destella la luz de un alma, porque todos ellos luchan sus propios infiernos. Lamentablemente, esa es solo mi forma de ver las cosas, yo seguiré siendo así, aunque el lobo sople y sople mi puerta, mi casa no se moverá.
En mis ojos impasibles  se mantendrá el reflejo del temple de los tuyos, nada más deliberado que desear encontrármelos de nuevo y volver a enfrentarme con mis propios cimientos.



Magia o esperanza ?....






Cada palabra que recibo de su boca parece un pedacito de cielo, cada vez me enamoro más como si no hubiera un límite para ello, en realidad no lo hay.
Me emborracha el alma, ya estoy tan embriagada que no pienso ni escucho con sensatez… ya nada es claro. Ya no tengo el control… y de hecho no es de mi preocupación haberlo perdido.
Así perdida me siento plena, me siento vulnerable y llena de susceptibilidad a cualquier señal o gesto que envíes por mí.
Se alzan los mares a la luz de la luna que es tuya y mía que siempre fue tan  nuestra.
Eres el mayor vicio,  el cual he cometido como  un pecado, como un adicto, sin remordimientos. Mi fruta prohibida, soy la serpiente que envolvió ese deseo en ti y en mí. Como enredadera me colgué trepando a tu pecho, me fui enroscando a tu cuerpo, para que me lleves en tus pasos.
Siempre imaginé con un amor de cuentos, con vivir la novela de amor, más temeraria, romántica y arriesgada de todos los tiempos, que apuesta alta tenía una criatura ingenua como yo en mente. Tal vez no nací en la época, donde  el noble metal de las espadas decidían el destino de nuestras almas… pero debo admitir sin dudas que gracias a todos esos enaltecidos deseos. Y a mí perseverante testarudez, mí infantil sueño se hizo realidad, abrió caminos y puertas ocultas del universo.
Nos unimos en un solo momento eterno, creamos mas que un lazo un lenguaje unico y diferente.
La magia se cree extinta, pero quien dice que el amor  no será los rastros de  esperanza que en un lugar yace brotando como un manantial de fuegos artificiales. Porque así destella mi corazón al tocarse con el tuyo.
Y te encontré ahí, cuando no te esperaba. Y tú estabas al igual que yo moviendo tu mundo para encontrar esa aventura.
Y  a pesar de que siempre entre nosotros hay un adiós, hay muchas formas de despedirse, dando la mano, dando la espalda, nombrando fechas con voz de olvido, moviendo un ramo ya deshojado, por suerte a veces queda un abrazo, dos utopías, medio consuelo, una confianza que sobrevive, esa esperanza y entonces ahí viene el triste adiós, que dice que ojalá vuelvas.
Pero aun así si tu no vuelves yo iré por ti. Y si con todo ello no logro encontrarte a la mitad del cielo, te amare de todas las maneras que uno puede hacerlo, te convertirás en el gozo sencillo de mis días, desde  la miel en mi boca y las risas de los niños… estarás ahí tan presente como la calidez del sol sobre mi piel.
Y el adiós es un extraño compañero, porque sigue aquí surfeando este mar de estrellas conmigo a 4000 kilómetros  de distancia. Este es tu adiós yo te lo he guardado, madura cada día, con cada florecer de los cerezos y con cada otoño que deshojan.
Nada se detiene, ni yo me olvido, ni mi corazón incesante de anhelos.
Exprimo nuestras vivencias y no las dejo quedarse en el pasado, hago que me acompañen en mi camino, por nuestros astros, que nos guían, ellos  y nadie como ellos que son  el verdugo de la existencia, creo en su ambiciosa justicia.
Aun así no puedo avanzar contigo o con este pensamiento, porque te deseo a cada instante.
Te amo pero no luchare contra nuestro escritos destinados a ser o no. Seguiré disfrutando de tu recuerdo, del nuestro que seguirá alterándome.

Estarás ahí para cuando mis arrugas delaten un cuerpo anciano, seguirás amándome cuando ya no tenga la radiante belleza de la juventud.
Por mi amor que es lo único que poseo. Deseo que estés a mi lado para seguir estas huellas, por el atávico camino de la fortuna, vívelo conmigo, a mi lado, en mi mente, en mi corazón y en mis poesías.
Sigue mis rastros, mi polvo de inocencia, la magia que se ha desprendido con los años… está ahí como la estela de un barco navegando por corrientes tormentosas y a veces calmas. Encuéntralo.
Bésame antes de irte, llevo ese traje rosa y blanco que te enloquecía. Con encaje  y enaguas enganchado en el porta ligas. Llevo una taza de café esta mañana entre las manos y he escuchado un par de murmullos de los vecinos, despertando, escribo unas líneas en mi cuadernillo y sobre mi velador hay un gatito de cerámica que recordaras. Tiene tus ojos guardados y tu voz.
Ven a decirme que no lo olvidaras. Ven , mírame y dime que no extrañaras mi estruendosa risa en la madrugada ni mis manos tocando tu espalda.
Cuando tu voz susurre esas palabras, ¿Quién ha visto el viento? Ni tú ni yo lo hemos visto, pero el viento sopla, y hace que tiemblen las hojas. Quién lo ha visto, ni tu ni yo pero él está.
Y entre tú, el viento y mi amor… La Fe  

miércoles, 24 de junio de 2015

El Arte de Comer



Comer bien es un arte. No se trata sólo de atiborrarse. Es un gran arte: probar la comida, oler la comida, tocar la comida, masticar la comida, digerir la comida, y digerirla como algo divino. Es divino; es un regalo de lo divino.
Los hindúes dicen: Anam Brahma, la comida es divina. Así que come con gran respeto, y mientras comes olvida todo, porque es una plegaria. Es una plegaria existencial. Estás comiendo lo divino, y lo divino te va a nutrir.... Es un regalo que debe aceptarse con profundo amor y gratitud. Y no atiborres al cuerpo, porque al atiborrar al cuerpo es estar en contra del cuerpo. Es el otro polo. Hay personas que están obsesionadas con el ayuno, y hay personas que están obsesionadas con atiborrarse. Ambas están equivocadas porque de las dos maneras el cuerpo pierde su balance.
Un verdadero amante del cuerpo come sólo al punto en el que el cuerpo se siente perfectamente en silencio, balanceado, tranquilo; en donde el cuerpo siente que ni se está inclinando a la izquierda ni a la derecha, sino justo en el medio. Es un arte entender el lenguaje del cuerpo, entender el lenguaje de tu estómago, entender lo que se necesita, darle sólo lo que se necesita, y darlo de manera artística, de manera estética.
Los animales comen, el hombre come. Entonces, ¿cuál es la diferencia? El hombre hace del comer una gran experiencia estética. ¿Qué caso tiene tener una hermosa mesa en el comedor? ¿Qué caso tiene el poner ahí velas encendidas? ¿Qué caso tiene el incienso? ¿Qué caso tiene el pedirle a los amigos que vengan y participen? Es convertirlo en un arte, no sólo atiborrarse. Pero éstas son señales externas del arte; las señales internas consisten en entender el lenguaje de tu cuerpo: escucharlo, ser sensible a sus necesidades. Y entonces comes, y entonces durante todo el día no te acordarás de la comida para nada. Sólo cuando el cuerpo tiene hambre llegará de nuevo el recuerdo. Entonces es natural.
~Osho.




La vida en un Trazo





-¿Cuantas mujeres arquetipos llevamos en nuestro interior?-¿ cuales son las que afloran en nuestro devenir ?-, ellas van integrando sus historias a nuestras memorias instintivas, -¿Que diosas guían e inspiran nuestras voces?-.El profundo brillo infinito de las miradas. llevan en si el nebuloso misterio de la vida que se nos ha olvidado recordar.

Mi obra "La Mujer Azul"

Tan solo Un Día






Nacemos en un día.
morimos en un día.
Podemos cambiar en un día.
Nos podemos enamorar en un día.
Cualquier cosa puede pasar en tan solo un día.



martes, 23 de junio de 2015

Guerreras





En este camino me he encontrado muchos soldados, de brillantes armaduras. muchos de ellos se convirtieron en mi mas grandes amigas, mis compañeras, hermanas y madre. 
uno no se imaginaria que aquí en el campo de la batalla donde cobras sabiduría podrías contemplar almas de otros tiempos .
a todas ellas les dedicare estas palabras:
" Hay almas a las que uno tiene ganas de asomarse,
como una ventana llena de sol."


"Ella había vagado por muchas vidas... Había sido esclava, reina, campesina y poeta. Diferentes ciudades, diferentes cuerpos, una misma maldición.... Volver a amarle en cada reencarnación" F.Vences

Salvajes




            "Nosotras llevamos en nuestro interior el caos  

              que dio luz al universo."